En el País Valencià y Madrid se usarán las siglas LGTBI+ mientras que en las Islas Canarias van más allá e incluyen LGBTIQ+ en contra lo aprobado en el Congreso Federal
El PSOE celebró su 41 Congreso Federal en Sevilla hace apenas dos meses. El cónclave del partido que lidera Pedro Sánchez sirvió para un consenso, sobre el papel, respecto a uno de los temas políticos más polémicos a nivel interno últimamente, el de la financiación autonómica y modelo territorial. En cambio, dejó algunas heridas en relación al uso de las siglas LGTBIQ+ y una división que, aunque parecía superada, estaba latente.
En la ponencia marco, documento político base del Congreso Federal, los socialistas usaban las siglas LGTBIQ+ o LGBTI+. Pero durante el proceso de recogida de enmiendas se anticipaba ya que habría debate. Varias federaciones y sectores presentaron un puñado de propuestas para que el PSOE se limitara a usar LGTBI.
La sigla «Q» hace referencia a las personas «queer«, que hace referencia a aquellas personas que rechazan todo tipo de clasificaciones hegemónicas del sistema binario varón/mujer, heterosexualidad/homosexualidad. La sigla «+» incluye a los colectivos que no están representados en las siglas anteriores. Estarían incluidas identidades como el género fluido o las personas no binarias, así como otras orientaciones sexuales como la pansexualidad o la asexualidad.
Las siglas de la discordia
La intención de la dirección del PSOE en Ferraz, según destacaron entonces, era poder usar con consenso el término +, que a su juicio ya incluye al resto. Sobre todo con la argumentación hacia dentro de que es la terminología que usa el Ministerio de Igualdad, en manos de Ana Redondo, y su unidad específica: «Dirección General para la Igualdad real y efectiva de las personas LGTBI+«.
Ya en Sevilla se llegó al Plenario, espacio de votación de las enmiendas que no han sido consensuadas previamente en las comisiones. Ahí salieron adelante las propuestas del autoproclamado sector del «feminismo clásico» para que las siglas se quedaran en LGTBI. También se aprobó una enmienda sobre vetar la participación de personas del «sexo masculino» en competiciones deportivas para mujeres.
La decisión generó mucha polémica y fue criticada tanto por los colectivos LGTBIQ+ como por otras fuerzas de izquierda. Desde la dirección federal del PSOE se afanaron en explicar que el partido no abandonaría la lucha por todas las sensibilidades pese a lo aprobado en el Congreso. Aquellos días se produjeron acusaciones cruzadas y una búsqueda de explicaciones para descubrir qué había pasado realmente.
Congresos regionales que revierten lo sucedido en Sevilla
Tras el 41 Congreso Federal de los socialistas ahora se están celebrando los congresos regionales. En ellos también se elaboran ponencias específicas y se presentan enmiendas. En varias federaciones ha habido ya movimientos interesantes sobre esta cuestión que revierten, en parte, lo sucedido en Sevilla.
Hasta el momento se han celebrado ya los cónclaves de Asturias, Extremadura, Castilla-La Mancha, Islas Canarias, País Valencià y la Comunidad de Madrid. La propuesta más interesante ha llegado en Canarias. La federación que lidera Ángel Víctor Torres ha incluido la terminología LGTBIQ+ en sus documentos. Las siglas aparecen más de 40 veces en la ponencia.
Este fin de semana se celebraron los Congresos del PSPV y el PSOE de Madrid, liderados por Diana Morant y Óscar López. Ambas federaciones, dos de las más importantes en el PSOE, usarán en este caso las siglas LGTBI+, al igual que hace el Ministerio de Igualdad y pretendía Ferraz para el Congreso Federal. Aparte de las menciones políticas en los documentos, sus direcciones cuentan con una secretaría específica denominada LGTBI+. En el PSPV su responsable es Marta Amat y en Madrid, Elena Marín.
Víctor Gutiérrez, tuiteado: «Aprobamos en el congreso del PSOE-M el uso de la nomenclatura ‘LGTBI+’. Queda incorporado de manera oficial el ‘+'», ha publicado en redes sociales Gutiérrez: «También se incluye en el documento, por primera vez, a las personas no binarias«.