El proyecto «Don’t say gay» (No digas gay) impedirá hablar de educación sexual y de género en las aulas de Florida
El proyecto de ley llamado «Don’t say gay» (No digas gay), que prohibiría el hablar sobre identidad de género y orientación sexual en las escuelas primarias de Florida (EE.UU.), fue aprobado por un comité del Senado estatal y prosigue su trámite legislativo. La controvertida propuesta, que recibió el visto bueno del Comité de Educación del Senado por 6 votos a favor y 3 en contra, impediría que los maestros hablen sobre dichos temas al considerar que no son «apropiados para la edad o el desarrollo de los estudiantes«.
Esta iniciativa republicana, que controla el Senado y la Cámara de Representantes estatal, ha recibido críticas por parte de grupos de los derechos de la comunidad LGTBIQ+, críticas a las que también se ha sumado la Casa Blanca. «Hoy los políticos conservadores de Florida presentaron una legislación diseñada para atacar a los niños LGTBIQ+. En lugar de dificultar el crecimiento de los jóvenes, la Administración Biden se centra en mantener las escuelas abiertas y apoyar la salud mental de los estudiantes«, ha resaltado la Casa Blanca en Twitter.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha afirmado en su cuenta oficial de Twitter que este es un proyecto de ley «odioso» y que la administración luchará para proteger a los miembros de esta comunidad. «Quiero que todos los miembros de la comunidad LGTBIQ+, especialmente los niños que se verán afectados por este odioso proyecto de ley, sepan que son amados y aceptados tal como son. Os cubro las espaldas, y mi Administración continuará luchando por la protección y la seguridad que os merecéis«, ha dicho.
I want every member of the LGBTQI+ community — especially the kids who will be impacted by this hateful bill — to know that you are loved and accepted just as you are. I have your back, and my Administration will continue to fight for the protections and safety you deserve. https://t.co/OcAIMeVpHL
— President Biden (@POTUS) February 8, 2022
Perjudicar a los más vulnerables
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, ha resaltado en rueda de prensa que «la legislación perjudicaría a los niños que necesitan la mayor protección» y que ya, de por sí, «son vulnerables al acoso y la violencia solo por ser ellos mismos«. «No se equivoquen: esta no es una acción aislada en Florida. En todo el país, estamos viendo a los líderes republicanos tomar medidas para regular lo que los estudiantes pueden o no leer, lo que pueden o no aprender y, lo que es más preocupante, quiénes pueden ser o no ser«, ha dicho, agregando que esta legislación «está diseñada para apuntar y atacar a los niños«.
De ser aprobado el proyecto, los padres podrán presentar demandas judiciales contra el distrito escolar y recibir una indemnización por daños y perjuicios si creen que sus políticas infringen el «derecho fundamental a tomar decisiones sobre la crianza y el control de sus hijos«. El proyecto «Don’t say gay» (No digas gay) impedirá hablar en las aulas de educación sexual y de género. Al menos cuatro estados estadounidenses tienen legislaciones similares, como Texas, Oklahoma, Luisiana y Misisipi.