Burkina Faso se suma a la lista de más de 60 países que penalizan la homosexualidad
Burkina Faso ha sido el último país en adoptar una legislación que penaliza cualquier práctica homosexual y que prevé penas de dos a cinco años de prisión acompañadas de multas, con lo que se une a la extensa lista de 60 naciones que castigan penalmente la homosexualidad.
La Asamblea Legislativa de Transición (ALT, Parlamento) de Burkina Faso aprobó este lunes el proyecto sobre el Código de las Personas y la Familia, que prevé penas de prisión, acompañadas de multas, para quienes sean condenados por esas prácticas. En caso de reincidencia, si la persona no es de nacionalidad burkinesa, «será pura y simplemente expulsada del país«, afirmó el ministro de Justicia, Rodrigue Bayala.
«Retroceso alarmante«
En un comunicado, Amnistía Internacional tildó la ley de «retroceso alarmante» que socava las «disposiciones progresistas» que contiene el nuevo Código de las Personas y la Familia, como la decisión de fijar la edad mínima para contraer matrimonio en 18 años, tanto para niños como para niñas, y de establecer el consentimiento entre ambas partes como base del matrimonio.
«Sin embargo, nos alarma y nos preocupa profundamente la criminalización de las relaciones entre personas del mismo sexo. Esto no hace más que generar discriminación y violar el derecho a la igualdad ante la ley«, subrayó Marceau Sivieude, director regional de Amnistía Internacional para África occidental y central.
La nueva normativa de este país de África occidental se enmarca en una reciente escalada del discurso anti-LGBTIQ+ en el continente africano, donde se encuentran más de una treintena de los más de sesenta países que criminalizan las relaciones entre personas del mismo sexo en el mundo.
Burkina Faso encajó dos golpes de Estado en 2022: uno el 24 de enero, dirigido por el teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba, y otro el 30 de septiembre, encabezado por el capitán Ibrahim Traoré, quien dirige actualmente la nación.
Retroceso de derechos en África
Antes de Burkina Faso, el último fue Mali que en 2024 tipificó la homosexualidad como delito – mientras que anteriormente la ley solo prohibía la «indecencia pública» – y también criminalizó a las personas transgénero.
Ghana, que ya castigaba con penas de cárcel las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo, aprobó, también en 2024, una ley que condena con penas de cárcel a quien se identifique como homosexual.
Pero el mayor retroceso se produjo en Uganda, que aprobó en 2023 una ley que contempla la pena de muerte para los llamados casos agravados, como tener relaciones homosexuales con menores de 18 años o infectar a una pareja con una enfermedad crónica.
Además de Uganda, otros países incluyen en su ordenamiento jurídico la pena capital para quienes practiquen la homosexualidad, como Mauritania, Nigeria o Somalia, en el continente africano, y Arabia Saudí, Irán y el Yemen, en Asia. Afganistán y Pakistán también contemplan la posibilidad de la pena de muerte.
De los 193 Estados miembros de la ONU, 65 -incluido Burkina Faso- penalizan actualmente por ley las relaciones entre personas del mismo sexo, según la organización no gubernamental británica Human Dignity Trust.